viernes, 29 de abril de 2011

Los Privilegios de nuestros Políticos

Leia Mais…

sábado, 16 de abril de 2011

Mis Palabras

Mis palabras son fáciles de comprender
y fáciles de practicar.
Pero nadie en el mundo las comprende,
nadie las practica...

Mis palabras tienen su fundamento
y los actos tienen su dueño.
Pero nadie los conoce
y nadie me conoce a mí...

Raros son los que siguen,
y éste es el máximo valor.
El sabio oculta bajo pobres vestidos
piedras preciosas en su pecho.

Leia Mais…

Viaje

Sin salir de la puerta
se conoce el mundo.
Sin mirar por la ventana
se ve el camino del cielo.


Cuanto más lejos se va,
menos se aprende.

Así, el sabio, 
no da un paso y llega,
no mira y conoce,
no actúa y cumple.  

Leia Mais…

viernes, 15 de abril de 2011

Vivir es llegar y morir es volver

Vivir es llegar y morir es volver.

Tres hombres de cada diez caminan hacia la vida.
Tres hombres de cada diez caminan hacia la muerte.
Tres hombres de cada diez mueren en el ansia de vivir.
¿Cómo puede sobrevivir el décimo hombre?

He oído decir que quien sabe cuidarse
viaja sin temor al rinoceronte,
ni al tigre,
y va desarmado al combate.

El rinoceronte no encuentra donde hincarle el cuerno,
ni el tigre donde clavarle su garra,
ni el arma donde hundir su filo.
¿Por qué?
Porque en él nada puede morir.

Leia Mais…

martes, 12 de abril de 2011

Aleister Crowley in Colors

Ninguna, sopló la luz, tenue y vaporosa de las estrellas, y dos...
Porque estoy dividida para el amor, para la posibilidad de unión.
Esta es la creación del mundo, que el dolor de la división es como nada y el gozo de la disolución todo.

¡Seguid las pruebas de mi conocimiento! ¡Buscadme a Mí únicamente! Entonces las alegrías de mi amor os redimirán de todas las penas. Es así: lo juro por la bóveda de mi cuerpo; por mi corazón sagrado y mi lengua; por todo lo que puedo dar, por todo lo que anhelo de todos vosotros.

Mi número es 11, como todos los números de los que son de nosotros. La Estrella de Cinco puntas, con un círculo en medio, y el círculo es Rojo. Mi color es negro para el ciego, pero el azul y el dorado son vistos por el que ve. También tengo una gloria secreta para los que me aman.

¡Si! ¡Festejad! ¡regocijaos! ya no hay mas miedo. Hay la disolución, y el éxtasis eterno en los besos de Nu.


Leia Mais…

jueves, 7 de abril de 2011

Los Amos del Mundo

Permitidme que os remita este artículo de Arturo Pérez-Reverte. Está escrito hace trece años y resulta muy curiosa la clara visión que tuvo del presente.

Espero que sea de vuestro agrado.

J. L.



LOS AMOS DEL MUNDO


Por Arturo Pérez-Reverte


-Publicado en 'El Semanal' el 15 de noviembre de 1998-



Usted no lo sabe, pero depende de ellos. Usted no los conoce ni se los cruzará en su vida, pero esos hijos de la gran puta tienen en las manos, en la agenda electrónica, en la tecla "intro" del computador, su futuro y el de sus hijos. Usted no sabe qué cara tienen, pero son ellos quienes lo van a mandar al paro en nombre de un tres punto siete, o un índice de probabilidad del cero coma cero cuatro. Usted no tiene nada que ver con esos fulanos porque es empleado de una ferretería o cajera de Pryca, y ellos estudiaron en Harvard e hicieron un máster en Tokio, o al revés, van por las mañanas a la Bolsa de Madrid o a la de Wall Street, y dicen en inglés cosas como long-term capital management, y hablan de fondos de alto riesgo, de acuerdos multilaterales de inversión y de neoliberalismo económico salvaje, como quien comenta el partido del domingo. Usted no los conoce ni en pintura, pero esos conductores suicidas que circulan a doscientos por hora en un furgón cargado de dinero van a atropellarlo el día menos pensado, y ni siquiera le quedará el consuelo de ir en la silla de ruedas con una recortada a volarles los huevos, porque no tienen rostro público, pese a ser reputados analistas, tiburones de las finanzas, prestigiosos expertos en el dinero de otros.

Tan expertos que siempre terminan por hacerlo suyo. Porque siempre ganan ellos, cuando ganan; y nunca pierden ellos, cuando pierden. No crean riqueza, sino que especulan. Lanzan al mundo combinaciones fastuosas de economía financiera que nada tienen que ver con la economía productiva. Alzan castillos de naipes y los garantizan con espejismos y con humo, y los poderosos de la Tierra pierden el culo por darles coba y subirse al carro. Esto no puede fallar, dicen. Aquí nadie va a perder. El riesgo es mínimo. Los avalan premios Nóbel de Economía, periodistas financieros de prestigio, grupos internacionales con siglas de reconocida solvencia. Y entonces el presidente del banco transeuropeo tal, y el presidente de la unión de bancos helvéticos, y el capitoste del banco latinoamericano, y el consorcio euroasiático, y la madre que los parió a todos, se embarcan con alegría en la aventura, meten viruta por un tubo, y luego se sientan a esperar ese pelotazo que los va a forrar aún más a todos ellos y a sus representados. Y en cuanto sale bien la primera operación ya están arriesgando más en la segunda, que el chollo es el chollo, e intereses de un tropecientos por ciento no se encuentran todos los días.



Y aunque ese espejismo especulador nada tiene que ver con la economía real, con la vida de cada día de la gente en la calle, todo es euforia, y palmaditas en la espalda, y hasta entidades bancarias oficiales comprometen sus reservas de divisas. Y esto, señores, es Jauja. Y de pronto resulta que no. De pronto resulta que el invento tenía sus fallos, y que lo de alto riesgo no era una frase sino exactamente eso: alto riesgo de verdad. Y entonces todo el tinglado se va a tomar por el saco. Y esos fondos especiales, peligrosos, que cada vez tienen más peso en la economía mundial, muestran su lado negro.


Y entonces, ¡oh, prodigio!, mientras que los beneficios eran para los tiburones que controlaban el cotarro y para los que especulaban con dinero de otros, resulta que las pérdidas, no. Las pérdidas, el mordisco financiero, el pago de los errores de esos pijolandios que juegan con la economía internacional como si jugaran al Monopoly, recaen directamente sobre las espaldas de todos nosotros.


Entonces resulta que mientras el beneficio era privado, los errores son colectivos, y las pérdidas hay que socializarlas, acudiendo con medidas de emergencia y con fondos de salvación para evitar efectos dominó y chichis de la Bernarda.. Y esa solidaridad, imprescindible para salvar la estabilidad mundial, la paga con su pellejo, con sus ahorros, y a veces con su puesto de trabajo, Mariano Pérez Sánchez, de profesión empleado de comercio, y los millones de infelices Marianos que a lo largo y ancho del mundo se levantan cada día a las seis de la mañana para ganarse la vida. Eso es lo que viene, me temo. Nadie perdonará un duro de la deuda externa de países pobres, pero nunca faltarán fondos para tapar agujeros de especuladores y canallas que juegan a la ruleta rusa en cabeza ajena. Así que podemos ir amarrándonos los machos. Ése es el panorama que los amos de la economía mundial nos deparan, con el cuento de tanto neoliberalismo económico y tanta mierda, de tanta especulación y de tanta poca vergüenza.

Leia Mais…

Miedo


"Nuestro miedo más profundo no es que seamos inadecuados. Nuestro miedo más profundo es que somos poderosos sin límite.

Es nuestra luz, no la oscuridad lo que más nos asusta.

Nos preguntamos: ¿quién soy yo para ser brillante, precioso, talentoso y fabuloso?

En realidad, ¿quién eres tú para no serlo? Eres hijo del universo.

El hecho de jugar a ser pequeño no sirve al mundo. No hay nada iluminador en encogerte para que otras personas cerca de ti no se sientan inseguras.

Nacemos para hacer manifiesto la gloria del universo que está dentro de nosotros.

No solamente en algunos de nosotros: está dentro de todos y cada uno.

Y mientras dejamos lucir nuestra propia luz, inconscientemente damos permiso a otras personas para hacer lo mismo.

Y al liberarnos de nuestro miedo, nuestra presencia automáticamente libera a los demás."

Nelson Mandela

Leia Mais…